AQUÍ TUMEREMO
Rafael (Chino)
Velázquez
Rafael.velazquez.a@gmail.com
DIA NACIONAL DE LA MASONERIA VENEZOLANA
II: y PP: HH: Don
Francisco de Miranda
El día 28 de marzo es día de
vibraciones especiales en los corazones de todo aquel “Profano” que ha tenido el
privilegio de iniciarse en los Augustos Misterios de la Francmasonería
Universal. En el venezolano esas vibraciones son las más intensas si se piensan
que ha sido, es y será precisamente la memoria de un Ilustre hombre de esta
tierra quien las origina: DON SEBASTIAN
FRANCISCO DE MIRANDA Y RODRIGUEZ,
nacido en Caracas, para bien de la humanidad, un 28 de marzo de 1750, hace
exactamente 265 años.
La masonería venezolana celebra
la fecha como DIA MASONICO NACIONAL.
Fue instituida con extraordinario acierto el 1ro de enero de 1.950 por el Gran Maestro de la Gran Logia de la
Republica de Venezuela para la época, el Querido Hermano Dr. José T. Uzcategui,
y es que a la hora de la escogencia, como es de costumbre, de una fecha en los
anales históricos de la Augusta Orden de los hombres Libres y de Buenas
Costumbres, tenía que marcarse un alto en las páginas del Ilustre Compatriota,
nacido para vivir, luchar y morir por la libertad de los pueblos oprimidos,
especialmente el de su patria que la
extendía sus manos suplicantes y ese no fue otro que el Ilustre y
Poderoso Hermano DON SEBASTIAN FRANCISCO DE MIRANDA Y RODRIGUEZ
“Yo hablé primero que ustedes de
libertad y de derechos del hombre”, diría el héroe a los franceses en 1.792: por eso y por sus ejecutorias es
PRECUSOR de la independencia
hispanoamericana, del Panamericanismo y de la Masonería de América.
Nutrió su espíritu y bebió en las sublimes enseñanzas de la Orden Francmasónica para servir a las causas de la LIBERTAD y la IGUALDAD. Inicio a los más
preclaros patriotas del continente cuando eran sólo embriones y esperanzas;
sabia que estos, como él aprenderían en
las noches de Logia a amar la Patria, a sentirla, a luchar por ella frente a poderes en decadencia y nugatorios
de derechos esenciales. No se equivocó: “sus
aprendices serían más tarde los Maestros Libertadores de América, toda.
Los masones del mundo,
conocedores de los hechos identificados en la historia como “El abrazo de
Bolívar y Morillo” en Santa Ana de Trujillo y “Conferencia de Guayaquil”, entre
San Martin y nuestro Libertador, ven en ellos sólo algo natural; no así
historiadores y por no decir gente culta quienes es sus análisis y meditaciones
se preguntan con razón: ¿Cómo es posible la existencia de la “Verdad y la
Sinceridad” en tales actos escenificados por enemigos rivales? Y mayor es la
sorpresa cuando se conocen la evidencia de una renuncia voluntaria en ellos: en
primero, se llega al sacrificio de un prestigio bien ganado y al riesgo de caer
en el descredito (Don Pablo Morillo); en el segundo, de una renuncia a la
gloria más excelsa para dejar en manos de un rival el término de una obra
gigantesca (Don José de San Martín).
Sólo al calor que comunican los
principios y doctrina francmasónicos estos hechos pueden generarse y en ellos,
y en cada uno de ellos, tienen que estar el espíritu del Precursor, Maestro de
Maestros el ilustre y Querido Hermano DON SEBASTIAN FRANCISCO DE MIRANDA Y
RODRIGUEZ
Por eso hemos dicho al comienzo
de esta Crónica que el día Masónico motiva el corazón de todo aquel que haya
cruzado el umbral de la “Iniciación”, que al recibir la “Luz” resplandecientes
de Nuestros Augustos Misterios percibe esas “Vibraciones Especiales” convirtiéndose
en el” Sublime Tributo” al “Gran Hombre”, sembrador de la semilla libertaria en
todo un mundo y sin duda alguna, el hispanoamericanismo de mayor relieve de su
tiempo “EL PRECUSOR DON SEBASTIAN FRANCISCO
DE MIRANDA Y RODRIGUEZ”
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