lunes, 27 de junio de 2016

AQUI TUMEREMO


AQUÍ TUMEREMO

Rafael “Chino” Velázquez

Rafael.velazquez.a@gmail.com

 

Disciplina, Moral y Ética

La lógica social nos indica que: “los desacuerdos y conflictos entre personas  y entre los grupos ocurren  a diario  en la convivencia humana”. A veces sentimos que es difícil vivir en paz con aquellos que tienen costumbres, creencias religiosas, color de piel, nacionalidad o ideas políticas diferentes a las nuestras; esto sucede en la casa, la escuela, él trabajo, el vecindario, el país y el mundo.

Concebimos que la convivencia pacífica se logre cuando somos tolerantes con los demás. La tolerancia es respeto a la diversidad y aceptación del pluralismo. No se trata de “hacernos los locos” o volvernos indiferente para que no nos molesten. Ser tolerante es mantener una disposición activa a admitir en las otras personas maneras de ser, pensar y comportarse distintas a las propias.

La tolerancia es el principio lógico para una convivencia en su exacta dimensión….pero, siempre existe ese magullismo  político  para rarificar las controversias personales y llevarlas a un plano politiquero y barato. La irracionalidad timorata afecta la moralidad de una sociedad  que siente ese batacazo de inicuas y pimentosas  verborreas  utilizadas para arbitrar determinadas polémicas personales.

Los habitantes del Municipio Sifontes merecen respeto y consideración. No existe ninguna razón para que el pueblo perciba un ventusco, pérfido y relancino discurso; cuyo contenido desdice la compostura que debe asumir cualquier ciudadano y mucho menos cuando se trata de personas dizque representan a determinado conglomerado.  

EL Soberano merece un mínimo de circunspección. A tales efectos es necesario fijar una posición firme en cuanto a la forma de enjuiciar habituados enfrentamientos bien sean personales o políticos.

El pueblo no tiene que ser testigos de inoportunas, bajas y perversas frases que perturban la tranquilidad ciudadana. Mucho menos escuchar  adjetivos que atentan  en contra de la moralidad y buenas costumbres.

Es menester recordar tres importantes conceptos, que en ocasiones poco son tomados en cuenta que son motivo de desviaciones en el diario acontecer de los pueblos y en correcta actuación en concordancia con el comportamiento de los seres humanos. El primero de ellos es el que se refiere a la Ética que según los tratadistas es la parte de la filosofía que se ocupa del estudio de la moral y de las obligaciones del hombre, por supuesto viene a ser una disciplina que tiene como objeto de descripción y de reflexión, la moral de los actos humanos.

En consecuencia, la  Ética, según la perspectiva que tome al enjuiciar los valores, las normas y los hechos, puede ser autónoma, porque contempla el sujeto de la moral como fuente y fundamento de toda moralidad.

Conviene finalmente, para dejar claro estos tres conceptos, señalar que la Ética se forma en el medio donde vivimos, alrededor de las costumbres, de manera que el hombre se va amoldando y va creando una especie de arma o factor de convivencia, mientras que la Moral nace con la persona, es algo intimo, subjetivo. Significa que los seres humanos la conservamos, la mejoramos o la dañamos, de manera qué es propia de la persona.

 

Podemos señalar que: “las relaciones  con los demás, nos dictan las pautas para la ética”. La moral es lo que con más orgullo debemos cuidar, la ética es producto del medio social.
En consonancia con la realidad pueblerina, es necesario que a la hora de emitir determinados conceptos, apliquen la prudencia, la sensatez y la cordura, como principio lógico del respeto para con los demás. Todo ello sin ambigüedades, sin necesidad de proyectarse como “El mejor”, pues; estarían cayendo en un terreno repleto fantasías y morfías expresiones